La ubicación era increíble, el hotel estaba situado a 500 metros de la parada de autobús. Tenía una habitación tranquila, enorme, con vistas fabulosas, 2 grandes ventanas y una excelente cama, dormí muy bien.

Personal eficiente, habitaciones de un tamaño decente con un buen desayuno buffet y un baño recién renovado y muebles modernos. Había un parking público disponible en la propiedad, con servicios muy buenos.

Ubicación cómoda y también ideal cerca de todo. Nos ofrecieron cambiar a una habitación que era bien decorada y reformada e incluía una caja fuerte privada, una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico. El personal era extremadamente servicial y muy amable, con consejos sobre lugares para comer.

Buena ubicación bien cerca de un restaurante, del centro y de un jardín, me sentí segura. La habitación doble en la que me alojé era de un tamaño decente y contaba con una cama súper cómoda. ¡Todo genial! 😊

En cuanto a lo positivo, el hotel ofrece habitaciones amplias y cómodas, con bonitas vistas y un ambiente encantador. se destaca la limpieza y comodidad de las habitaciones y el baño. El desayuno es bueno y satisfactorio.

Este hotel goza de una ubicación privilegiada respecto al valle, lo que permite disfrutar de unas vistas panorámicas impresionantes. Además, está cerca de todo lo que Vézelay tiene para ofrecer: la famosa catedral, los restaurantes y las tiendas. Las habitaciones son amplias, limpias y cómodas, con baños bien equipados. El desayuno también es muy bueno, con una variedad de opciones para satisfacer todos los gustos.

En cuanto al servicio al cliente, hubo algunas quejas sobre la falta de atención y la falta de soluciones a los problemas planteados.

Ubicación ideal cerca de la basílica. Tranquilidad y encanto del hotel.Habitaciones amplias y bien decoradas.Cena del restaurante deliciosa.Desayuno muy bueno.Personal excepcionalmente amable.Vistas preciosas desde las habitaciones.Buenas camas y baños cómodos.

Nada, todo excelente.